¿El PAN blofea o va por la transparencia sindical en el Senado..?

Hugo Páez

En Senado será la prueba de fuego para ver si el PAN está blofeando, o en verdad buscará meterle mano a la Reforma Laboral para democratizar y transparentar a los sindicatos con recursos públicos; esto es modificar el Artículo 123 Apartado “B”, constitucional, ese que dice Manlio Fabio Beltrones no incluyó la propuesta de Felipe Calderón, ya que reformarlo implica un proceso de cambio constitucional.
El señalamiento de Beltrones muestra una doble moral del PAN. En pocas palabras, convierte al partido en un protector hipócrita de la opacidad sindical. Y lo señala a detalle al sentenciar que en los 12 años de gobierno en la Presidencia de la República no se empeñaron en promover con firmeza la modificación a los sindicatos.
En las postrimerías y después del 2000, Vicente Fox Quezada prefirió mantener la alianza con Elba Esther Gordillo; Felipe Calderón imaginó necesitarla en los cerrados comicios del 2006, después de la elección, el entonces presidente del PAN Manuel Espino refirió al presidente que la líder vitalicia del Sindicato Magisterial nada aportó al partido, pero en la estrategia de intereses políticos, Calderón soportó los desplantes de Gordillo, y mas aún cuando se erigió en una de las principales detractoras de “su candidata” Josefina Vázquez Mota.
Ya con la derrota a cuestas, todos pensaron que Calderón dejaría dinamita pura a Enrique Peña Nieto, revestida de Reforma Laboral. Pero la disección del contenido resultó ser un traje a la medida del Presidente Electo que garantiza al mandatario saliente el blindaje necesario en temas inimaginables que flotarán después del 1 de diciembre.
Los balbuceos nerviosos y supuestamente iracundos de Javier Lozano, Gustavo Madero y Ernesto Cordero son parte del guión, alterado por la declaración de Beltrones. El desgarradero de vestiduras, necesario.
El coordinador parlamentario del PRI ya cumplió su parte en la Cámara de Diputados y manda los pollos engallados a Emilio Gamboa al Senado. Pero lo que vemos en medios no es mas que una puesta en escena que inició con el primero que rechazó culpas por evitar la cirugía mayor a los sindicatos.
La Reforma Laboral no tendrá mayor problema en la Cámara Alta, aun cuando las negociaciones tengan sus momentos de tensión natural por la conformación de la Comisión del Trabajo y Previsión Social presidida por el sonorense Ernesto Gándara, ligado al presunto narcotraficante Rafael Humberto Valenzuela detenido en España, quien fuera su cercano colaborador en la alcaldía de Hermosillo, y en la coordinación de la campaña a la Cámara Alta.
La Comisión está integrada por tres sindicalistas: Alejandra Barrales, ex dirigente del Sindicato de Sobrecargos, perteneciente a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT); Isaías González Cuevas, dirigente de la CROC y Armando Neyra, miembro de la dirigencia de la CTM.
Pero además en el Senado otros líderes sindicales, no integrantes de la Comisión, podrán presentar sus reservas: Carlos Romero Dechamps del Sindicato Petrolero; Joel Ayala Almeida de la FSTSE y Monica Arriola, hija de la líder vitalicia del Sindicato de Maestros Elba Esther Gordillo.
Ninguno de los representantes de los trabajadores integran la bancada del PAN, lo que resta compromisos sindicales que podrían obstaculizar la búsqueda de la democratización y transparencia de los gremios con recursos públicos, sin embargo, se verá en el Senado si prevalece la congruencia de Acción Nacional.

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