Hugo Páez
Un cambio radical le espera a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal: por primera vez no será dominada por el grupo parlamentario del mismo partido que del Jefe de Gobierno del DF, por lo tanto, la prioridad de Morena como primera iniciativa es la reducción del gasto en 933 millones de pesos anuales, como respuesta al viejo reclamo social de austeridad.
César Cravioto Romero pisa en terreno fértil, la propuesta va a la medida de los tiempos que exigen recortes presupuestales por la crítica espiral financiera internacional, la disminución de ingresos petroleros y la devaluación del peso frente al dólar.
Indudablemente es una propuesta de impacto mediático, del ajedrez político en la agenda del 2018 con las posibilidades que tendrá el partido de Andrés Manuel López Obrador de ver a uno de los suyos en el Palacio del Ayuntamiento, y por supuesto en la carrera presidencial del que será candidato por tercera vez.
Pero también es un reclamo de todos sectores. Me comenta César Cravioto que por todos lados la petición es de austeridad. Austeridad no sólo en el Legislativo, también en todas las áreas del Ejecutivo y por supuesto en el super bien remunerado Poder Judicial.
Desde la coordinación parlamentaria de Morena en la Asamblea, Cravioto exhorta a las otras fracciones a unirse al mandato ciudadano. En un simplista prorrateo cada diputado cuesta 30 millones 600 mil pesos al año, de hecho una primera reducción es eliminar 75 mil pesos mensuales en prerrogativas a cada uno.
Afirma el coordinador parlamentario: “Va a ser una definición importantísima de los otros grupos parlamentarios ¿Quieren seguir manteniendo sus privilegios o quieren darle un mensaje a la ciudadanía de trabajo austero y eficiente? Hasta el momento no hemos platicado con los otros grupos sobre la propuesta, pero no hay un sector de la población que no quiera austeridad” (#NotaDeVoz https://goo.gl/U7hyoC).
Cravioto sabe que pone el dedo en la llaga de intereses que ha dominado el recinto legislativo desde la primera legislatura en 1997. Las seis con el dominio del Sol Azteca y con la chequera abierta y la ventaja abrumadora fue fácil comprar pluralidades y consensos de sus opositores.
Es la historia de los tres últimos presidente de la Comisión de Gobierno con 34 de 66 curules en cada legislatura, Manuel Granados Covarrubias, Alejandra Barrales Magdaleno y Víctor Hugo Círigo.
Empoderados cada vez más por la menguante caída del PAN, de 17 curules en la IV Legislatura, 15 en la V y 13 en la VI, ahora Jorge Romero tendrá 10 diputados, pero otras condiciones por la división de la izquierda: Morena con 20 legisladores, PRD 19 y Movimiento Ciudadano con 2.
La presidencia de la Comisión de Gobierno era una apendice del Jefe de Gobierno, ahora Miguel Mancera Espinosa tendrá un gran obstáculo en el segundo trienio de su sexenio. Faltará una fina operación política, esa que no ha mostrado en sus primeros tres años.
Nada fácil para Raúl Flores y Patricia Mercado, por lo pronto, los ciudadanos estaremos esperando la reacción de los opositores a la propuesta de austeridad. Morena echa al toro más astado al ruedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario