Hugo Páez
A ver que tanto dura la tesis de Felipe Calderón en la Semana de la Transparencia 2012 en la que infirió que el gobierno de Enrique Peña Nieto tendrá que ser transparente porque no le queda otra.
La afirmación se basa en que los gobiernos de Acción Nacional implementaron en 10 años las políticas que habrán de seguirse en la materia, sin embargo, empieza a flotar datos en el equipo de transición sobre las barbaridades de los funcionarios federales de Felipe Calderón.
La versión del Presidente está en las antípodas de la iniciativa del Peña Nieto para fortalecer el IFAI y convertirlo en un organismo verdaderamente autónomo, si como dice, de no quedarle de otra, el nuevo gobierno simplemente mantendría el estatus de la Ley de Transparencia tal como está, pero la propuesta va en sentido contrario, a pesar del trabajo aceptable de Jacqueline Peschard.
En los últimos momentos de su gobierno, Felipe Calderón expone los casos de éxito para reforzar su imagen en medio de la peor de las crisis del PAN que amenaza con seguir los pasos del COPEI venezolano, el partido ideológicamente hermanado con Acción Nacional que le sirvió de modelo en los 80´s, pero que al perder el poder se desfondó por el alto grado de corrupción de sus funcionarios públicos.
Indudablemente la administración de Peña Nieto no podrá hacer gran cosa en materia de auditoría antes del 1 de diciembre, por eso a Calderón le urgía adelantar la Asamblea Nacional Extraordinaria del PAN para llegar con toda la fuerza presidencial a cimentar a su grupo al frente del Comité Ejecutivo Nacional, pero le ganó el tiempo, y de revelarse algunos casos de corrupción de su equipo, entre los que se sospecha enriquecimiento de sus allegados como lo expuso Televisa en el caso de Cesar Nava por la adquisición de un departamento en Polanco valuado en dos millones de dólares, mas otras propiedades en Estados Unidos, y la serie de inmuebles de militantes del PAN que publicó la revista Proceso el 17 de junio del 2012, el calderonismo llegará totalmente debilitado a la Asamblea Nacional.
Para evitar importar la historia venezolana del COPEI, los reconstructores del PAN tendrán que separar claramente usos y abusos del calderonismo, del resto de la militancia.
Lo sabe Gustavo Madero, lo conoce a detalle Josefina Vázquez Mota, y los legisladores que tratan de desarticular la estructura de los incondicionales de Felipe Calderón en el Senado y la Cámara de Diputados.
La protesta de los estudiantes que fueron sometidos por las torpezas del Estado Mayor distrajo el tema principal del evento, sobre todo las entrelineas de los silogismos del presidente, encaminados a la inferencia del auditorio, de que el próximo gobierno del PRI tendrá que someterse a las reglas de buen gobierno del PAN basadas en los avances significativos de la cultura de rendición de cuentas, combate a la corrupción y apego a la legalidad.
Pero la historia nos enseñó que la venda en los ojos escrutadores perdura hasta el último día del sexenio, habrá que esperar a ver si en verdad las aguas azules del calderonismo fueron transparentes, o turbias.
Blog: http://hugorenepaez.blogspot.com/
twiiter: @hugopaez correo: hugopaez@prodigy.net.mx
www.hugopaez.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario